El Estado y una asociacion profesional brindarán
asesoramiento al sector maderero en la fabricación del mobiliario infantil, y
en el desarrollo de una normativa que reglamente su producción.
El Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), el
Comité Nacional de Prevención de Lesiones de la Sociedad Argentina de Pediatría
(SAP) y algunos fabricantes, vienen desarrollándo acciones conjuntas con el fin
de establecer una norma nacional que permita definir parámetros para la
fabricación de muebles infantiles.
Diversos productos que se utilizan habitualmente para
sostén, transporte o entretenimiento de niños pequeños pueden estar asociadas a
accidentes. Estos muebles infantiles (cunas, camas, sillas altas, andadores,
camas cuchetas, sillitas para autos, corralitos, etc) pueden causar lesiones
por defectos en el diseño.
Por ejemplo, “el espacio entre los barrotes de una cuna
permite el paso del cuerpo de un bebé
pero no la cabeza lo que puede provocarle el ahorcamiento” explica Rubén
Zabala (MP 16490), miembro del Comité Nacional de Prevención de Lesiones de la
Sociedad Argentina de Pediatría. “Hay
defectos estructurales: fallas en el sistema de cierre de una baranda que
permiten la caída, la mala utilización de los mismos por no asegurar a un bebé
con los sistemas de sujeción, algo que permite su caída”, alerta Zabala.
“En primera instancia buscamos establecer ciertas pautas con
el objetivo final de mejorar la calidad
de nuestra industria del mobiliario infantil para proteger a nuestros niños”
expresa Diego Perelló , responsable del área de Vinculación Tecnológica del
INTI Madera y Muebles. “Entendemos que
hasta tanto no se instrumenten las herramientas legales que obligue a todos los fabricantes e
importadores a ensayar o certificar sus productos, podemos establecer un sello
de calidad INTI-SAP de carácter voluntario. Aspiramos a que este sello sea
reconocido principalmente por los usuarios, como sinónimo de calidad y
seguridad en mobiliario infantil”, se esperanza Perello.
En algunos países, la fabricación y venta de estos productos
está legislada, reglamentada y homologada, y es de carácter obligatorio. La
Unión Europea, EE.UU, Canadá y Australia
son un ejemplo a seguir.
Zabala cuenta en la entrevista con Telam que “las lesiones más
comunes están asociadas a caídas de cunas, camas cucheta, sillas altas,
andadores, cambiadores, etc. Las lesiones generalmente son leves pero muchas
motivan consultas a servicios de emergencia, estudios complementarios y tratamientos de distinta importancia”.
Para el INTI, “el trabajo conjunto con la SAP,
sensibilizando al empresariado y a los usuarios de estos productos buscara
cambiar el paradigma de la demanda de calidad en estos productos”, explica
Perello.
¿En qué momento está la elaboración de este
protocolo?
-Diego Perelló: Estamos avanzando en la conformación de un
comité técnico integrado por el Instituto Argentino de Normalización y
Certificación (IRAM), el INTI y la SAP, que tendrá como objetivo discutir
normas para todo el espectro del mobiliario infantil. No solo trabajaremos en
la transferencia de tecnologías para la mejora de la calidad a los fabricantes
de del sector, también trabajaremos con los proveedores de insumos: fabricantes
de pinturas, lacas y barnices.
Para el Doctor Zabala no alcanza con que “el Comité elabore
material de capacitación para que los pediatras puedan recomendar a los padres.
La existencia en el mercado de muebles infantiles autorizados y homologados
será una aporte fundamental a la seguridad de nuestros niños”.
Fuente: Agencia Télam - Ver más sobre Tecnología y Salud