El Ministerio de Salud Pública de la Provincia de Salta
emitió una resolución disponiendo instruir sumario administrativo en el
Hospital Público Materno Infantil de Salta, con el propósito de esclarecer una
situación de Violencia Obstétrica denunciada ante el Defensor del Pueblo de la
Nación.
La Defensoría del Pueblo nacional intervino debido a los
hechos denunciados por una mujer en ocasión del parto de su hija, ocurrido el
día 10 de noviembre de 2016, en el Hospital Público Materno Infantil de la
Ciudad de Salta.
Relató que “el 08/11/2016 se le diagnosticó que la beba
tenía poco líquido amniótico, por lo que se decide su internación y es
informada que no tenía dilatación. Desde un principio la parturienta se sintió
angustiada e intranquila pues no sabía ni era informada de qué pasaba con su
bebé, quedando en guardia con goteo de oxitocina para acelerar el parto.
Durante el proceso le hicieron tacto muchas veces tanto diferentes médicos como
residentes, y a la queja de dolor al ser revisada, le contestaban ‘te la tenés
que aguantar eso es tener hijos’, siendo humillada cada vez que manifestaba
dolor”.
Solicitó que se le practicara una cesárea por el dolor que
padecía y por el riesgo que implicaba la falta de líquido amniótico, a lo que
le respondían “que no pida cesárea porque no me la van a hacer. Que es fácil
tener hijos por cesárea y que yo voy a parto sí o sí. Que aguante…”
La madre de la denunciante, en igual sentido, contó que
también fue objeto de maltrato y humillaciones ante sus reclamos, mientras que
la pareja y padre de la niña nunca tuvo información ni le permitieron
acompañarla, y sólo mantenía contacto por teléfono celular.
La cesárea le fue negada sistemáticamente hasta límites
insostenibles, y ante la insistencia de un residente, pasó a cirugía. Pero su
terrible experiencia continuó, ya que relata que “el anestesista no sabía poner
la peridural, de lo que tomé conciencia por los propios murmullos de los
presentes reflejando esta impericia, dando como consecuencia la falta de
efecto, pues podía sentir y mover las piernas, padeciendo todo el dolor del
corte, recibiendo a su queja la orden de aguantar, ‘…aguantá porque sino vamos
a tener que parar la cesárea y tu hija se va a morir’, me decían”.
Finalmente, la niña nació a las 23.15, desmayándose la
parturienta en el alumbramiento. Asimismo, denunció que lo sucedido le produjo
un stress postraumático perinatal, provocándole dificultades para amamantar, a
lo que las enfermeras le exigían hacerlo pese a su dolor físico y emocional.
A los dos días del alta advirtió que su herida supuraba y
tenía fiebre, y al ser atendida en el Hospital, no la curaron, y simplemente le
dijeron que tome un calmante y se lave la herida.
De esta manera, la Defensoría nacional atendió la denuncia
que exponía una evidente situación de trato deshumanizado para con la madre y
su hija, que habría puesto en peligro su salud física, emocional y psicológica,
y en el entendimiento de que se trató de actos que constituyen violencia
obstétrica, dictó una resolución poniendo en conocimiento del Ministerio de
Salud Pública de la Provincia de Salta, a los fines sumariales y sancionatorios
como lo establece la Ley Nº 25.929 de Parto Respetado (Ley Provincial Nº
8.065).
Fuente: Defensor del Pueblo de la Nación - Ver más sobre Violencia Obstétrica