Investigadores de todo el mundo exponen los avances en
tratamientos basados en el sistema de defensa del organismo.
La inmunoterapia ha permitido, según los especialistas,
“crear un punto de inflexión” en la lucha contra el cáncer. “En estos cinco
años ha sido el mayor cambio en el tratamiento desde la quimioterapia, la
radioterapia y la cirugía”, ha afirmado este lunes el español Antoni Ribas,
investigador en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) y experto en
tratamientos contra el melanoma, durante el encuentro Cancer Immunotherapy Day
en Madrid.
El simposio, organizado por la Clínica Universidad de
Navarra y el Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA), dependiente de
este centro, ha girado en torno a los tratamientos que utilizan el bloqueo de
la capacidad de las células malignas para evitar a las defensas del organismo. Por
este descubrimiento James P. Allison y Tasuku Honjo han sido galardonados con
el Nobel de Medicina.
Ribas expuso, en la ponencia principal, los resultados de la
inmunoterapia en pacientes de melanoma avanzado, el tumor maligno cutáneo más
agresivo y letal. "Se consiguen supervivencias de hasta dos años en
enfermos cuya esperanza de vida era de un mes", aseveró, "el reto es
saber por qué no funciona en todos los casos". El encuentro ha convocado a
300 profesionales y a una decena de ponentes, investigadores de primer nivel
que han expuesto los avances en este campo.
Pese a que la inmunoterapia oncológica ha avanzado durante
la última década de "un modo revolucionario", Ignacio Melero,
investigador de inmunología del Cima, subraya que uno de los caminos principales
en la investigación actual es conseguir combinaciones de varios de estos
tratamientos para llegar a aquellos pacientes que "no se están
beneficiando" de la inmunoterapia. "Es muy importante encontrar otro
avance que nos permita pasar del 20%-40% de pacientes a los que estamos
beneficiando para abarcar a poblaciones de pacientes muy superiores e intentar
conseguir curas funcionales", ha explicado.
Melero también ha añadido que el uso de estos tratamientos
antes de realizar una intervención quirúrgica — conocidos como inmunoterapia
neoadyuvante— puede generar un cambio "radical" en el tumor, lo que
podría retrasar y prevenir la reaparición del cáncer en el paciente. "La
manera de saber si [el tratamiento] es eficaz es comprobar que, cuando el cirujano
extrae el tumor, la mayoría de las células tumorales han desaparecido. Los
ensayos que intentan confirmar estos avances están en curso", ha destacado
el investigador. Melero asegura que la investigación en este campo va a ser más
importante que en otras ramas de la medicina, ya que la industria farmacéutica
"está en una competición feroz" en el mercado de estos fármacos.
"Estamos consiguiendo cosas en modelos animales de cáncer que uno no
podría haber soñado hace cinco años", afirma el oncólogo
El codirector de Oncología Médica de la Clínica Universidad
de Navarra, Antonio González, ha especificado que hay que tener en cuenta que
la inmunoterapia no es igual de efectiva para todos los tipos de cáncer,
"de ahí la importancia", dice, de descubrir nuevas estrategias que
combinen estos fármacos con otros tratamientos como la quimioterapia. "En
el melanoma la inmunoterapia funciona, pero en los cánceres ginecológicos hay
un paradigma. Es todo lo contrario. Por ejemplo, en el cáncer de ovario no ha
llegado la inmunoterapia, probablemente por las características del
tumor", ha comparado el oncólogo.
La inmunoterapia se indica en casos de cáncer muy avanzado.
No obstante, según cuenta González, la efectividad del tratamiento en ese
contexto, algunos médicos están comenzando a incorporarlo en situaciones más
precoces. "Ya tenemos datos en algunos cánceres como el de pulmón, que un
tratamiento complementario de inmunoterapia consigue mejorar a la supervivencia
de estos pacientes. Lo estamos incorporando en el preoperatorio, en otros
tumores, como el cáncer de mama", ha comentado el experto.
Melero ha criticado que en España la investigación está
"muy infrafinanciada", lo que obliga a los científicos españoles a
"competir en un entorno internacional tremendamente potente" a partir
de la poca financiación pública y de la iniciativa privada. No obstante, los
especialistas se han mostrado optimistas y han afirmado que España ha sabido
estar a la cabeza en ensayos clínicos y en descubrimientos esenciales para tratamientos
de tumores, como en los de hígado, pulmón y vejiga.
Fuente: Diario El País - Ver más sobre Cáncer