James Allison fue galardonado este año en Medicina. Afirmó
que sí habrá mejorars en las terapias. Y puso énfasis en el prevención.
James Allison, uno de los ganadores del Nobel de Medicina
2018, afirmó que el cáncer "no va a desaparecer como problema de
salud" y, aunque la inmunoterapia por la que fue premiado irá mejorando,
puso el acento en la prevención y los hábitos de vida saludables.
Allison (70) y el japonés Tasuku Honjo (76) desarrollaron un
principio totalmente nuevo para tratar el cáncer estimulando la capacidad del
sistema inmunitario del cuerpo para atacar las células tumorales.
Aunque gracias a la inmunoterapia se han logrado importantes
avances en la cura de cánceres como el melanoma con metástasis, ésta no
funciona aún en todos los tipos ni con todos los pacientes, de ahí que sigan
las investigaciones en este prometedor campo.
El inmunólogo cree que "el cáncer no va a desaparecer
como problema de salud", pero habrá mejores formas combatirlo, aunque el
ganador del Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento hace énfasis en la
prevención, pues "la mayoría de casos" de pulmón e incluso de
melanomas "son causados por el estilo de vida".
La inmunoterapia irá mejorando, señala, y "a largo
plazo acabará curando casi todos los melanomas, una gran parte de los cánceres
de pulmón, casi todos los de riñón y puede ser que otros también".
El melanoma, en el que la inmunoterapia da grandes
resultados, tiene muchas mutaciones y al sistema inmunitario "le es más
fácil atacarlas", pero en el caso de tumores como el glioblastoma o el de
páncreas, con muchas células mieloides, "no hemos visto ninguna
eficacia", por eso la investigación sigue.
Allison sabe de lo que habla cuando se trata de cáncer: su
madre murió cuando él tenía diez años y también uno de sus hermanos -"mi
familia ha sido golpeada bastante fuerte" por la enfermedad, dice- y él ha
sobrevivido tres veces, la última se sometió a inmunoterapia, "dura, pero
muy eficaz".
Científico de investigación básica, su primer objetivo fue
"entender realmente" cómo funcionan las células T -una especie de
soldados del sistema inmunológico- porque "estaba convencido de que si lo
descubría" podía lograr que hicieran lo que él quisiera y así tratar el
cáncer.
Así descubrió que en el cuerpo hay moléculas que activan o
frenan las células T, con lo que controlándolas podía lograr que las defensas
del cuerpo atacarán las células cancerosas y las recordaran.
Allison no está de acuerdo con aquellos médicos que dicen
que habría que hacer del cáncer una enfermedad "manejable" -algunos
consideran que no se puede considerar nunca totalmente curada- porque en ese
caso los pacientes "sienten que están mirando siempre por encima del
hombro por si puede regresar".
Con la inmunoterapia, "al menos con el melanoma, si
resistes cuatro años ya no vuelve" y es que hace falta "que en un
momento se sientan curados, aunque tengan que hacerse controles de vez en
cuando".
Fuente: Télam/Clarín - Ver más sobre Cáncer