La norma establece como prioritaria tanto la prevención como
la erradicación definitiva de las formas de transmisión. La mayoría de los
recién nacidos "no son diagnosticados en la etapa de mayor efectividad del
tratamiento". Así lo indica la AGN en la actualización de su informe de
2012.
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La Federación Internacional de Asociaciones de Personas
Afectadas por la Enfermedad de Chagas (Findechagas) lanzó una campaña en la
plataforma change.org para recolectar firmas en apoyo del reconocimiento
oficial del 14 de abril como el Día Mundial de las Personas Afectadas por la
Enfermedad de Chagas.
La propuesta será sometida a votación en la 72ª Asamblea
Mundial de la Salud, que es el órgano decisorio supremo de la Organización
Mundial de la Salud (OMS), y que se celebrará a finales de mayo en Ginebra.
La Auditoría General de la Nación (AGN) actualizó un trabajo
que había hecho en 2012 relacionado con la enfermedad de Chagas, la principal
endemia del país, y comprobó que muchas de las recomendaciones que había
realizado no se llevaron a cabo.
Uno de los ejemplos más claros es que sigue sin
reglamentarse la Ley 26.281, sancionada en agosto de 2007, y continúa sin
establecerse la autoridad de aplicación. En el país hay 1.600.000 personas
infectadas por el Trypanosoma cruzi, de los cuales 255.558 son menores de 14
años y más de un millón, mayores de esa edad. Todos los años nacen 1.300 chicos
infectados por transmisión de madre a hijo. Se trata de una enfermedad que
afecta a los más pobres y está asociada a las malas condiciones de vida.
“El Programa de Chagas (PNCh) depende orgánicamente de la
actual Subsecretaría de Prevención y Control de Riesgos”, destaca la AGN en su
informe, aprobado en mayo y presentado la semana pasada.
Pero el Plan está, “de hecho”, bajo la órbita de la
Dirección de Enfermedad Transmisibles por Vectores, lo cual le quita
“institucionalmente” el "carácter prioritario" que la Ley le
otorgaría “a la prevención y el control de la enfermedad de Chagas” de estar
reglamentada.
Sí se notaron avances en la interrupción de la transmisión
vectorial, aunque por debajo de la meta (sólo en nueve de 19 jurisdicciones
endémicas). Pero no hay mejoras en los casos de recién nacidos de madres
chagásicas ni en chicos de entre 6 y 12 años, tal como establece la Ley. Sobre
este punto es importante recordar que en nuestro país cuatro de cada 100
mujeres embarazadas tienen Chagas.
La mayoría de los bebés “no son diagnosticados en la etapa
de mayor efectividad del tratamiento”. Los controles que, según la legislación,
deben realizarse a menores de 14 años, son pocos. En 2015, sólo se tomaron
muestras al 3,4% de la población a controlar y en 2016, sólo al 2,4%.
La AGN remarca que los 490 agentes que dependen de la ex
Coordinación Nacional de Control de Vectores “trabajan en acciones de control
de enfermedades transmitidas por otros portadores”, tales como paludismo,
dengue y zika. Y que sólo hay una Coordinadora Técnica con “dedicación
exclusiva” en el PNCh.
En 2016, sólo tomaron muestras al 2,4% de la población menor de 14 años a controlar.
En 2012, también hubo un cuestionamiento a la metodología
con que el Programa Nacional de Chagas recibía información de las provincias:
“eran datos parciales y no todas contaban con ellos”. Esta carencia
"dificulta la posibilidad de contar con diagnósticos integrales, precisos
y oportunos para adoptar las decisiones más adecuadas para alcanzar los
objetivos”, indica el actual informe.
La AGN resalta que “no se alcanzó la meta de interrupción de
la transmisión vectorial en los lapsos previstos” y en su nuevo trabajo
recomienda la provisión de personal idóneo para que intervenga en un plan de
control vectorial “con metas claras y precisas”.
También observaron la falta de evidencia “de la
implementación sistemática de campañas masivas a nivel nacional para informar,
concientizar a todos los sectores sociales y promover la participación
comunitaria activa”.
Qué hay de nuevo
La AGN advierte una “debilidad registral ante la ausencia de
datos sobre seguimiento, las interrupciones y sus causas y las finalizaciones
correctas”. En 2015, por ejemplo, se informaron 2.218 tratamientos para
pacientes con infección crónica y para casos agudos congénitos y vectoriales,
pero la demanda de medicación es superior, por lo que se estima que hay más
tratamientos que se hacen y no se notifican.
Fuente: El Auditor/ Chaco Día por Día – Ver más sobre Chagas