Pese a que en la Argentina el estudio para detectar la
enfermedad en la madre embarazada es obligatorio y se realiza masivamente, por
falta de seguimiento posterior y ausencia de controles, se estima que luego del
parto se detecta apenas 1 de cada 3 niños que contrajeron Chagas por esta vía.
“Lamentablemente, un adulto enfermo es un niño que no se
detectó”, remarcó el doctor Jaime
Altcheh, médico pediatra, miembro de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) e
investigador principal del CONICET. “Debemos cumplir debidamente las normas
referidas al tamizaje universal de Chagas para las embarazadas, detección de
los recién nacidos positivos y su tratamiento en busca de la curación”,
insistió.
En un informe reciente elaborado en conjunto por la
Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la
Salud (OPS), denominado “El futuro de la lucha contra el Chagas”, se advierte
que la transmisión materno infantil es hoy la principal vía de infección en los
países que han controlado la transmisión vectorial mejorando sus estándares de
vivienda y aplicando el tamizaje universal en bancos de sangre, situación que
incluye a la Argentina y en nuestra región se comparte con Brasil, Chile,
Honduras, Nicaragua, Paraguay y Uruguay. Contribuye también a este nuevo tipo
de transmisión vertical la migración de personas de áreas endémicas a zonas
urbanas.
Se calcula que un bebé de una madre con Chagas tiene entre
el 2 y el 8 % de posibilidades de contraer la infección durante el embarazo y
el parto. Distintas estimaciones refieren que nacen por año en nuestro país
entre 1000 y 1300 niños con Chagas, pero solo se logra diagnosticar y tratar a
un tercio de ellos.
Altchech indicó a DocSalud.com que la medicación disponible
para tratar el Chagas “no se puede administrar en el embarazo”, por de pronto
dar tratamiento a embarazadas para prevenir la transmisión perinatal no es una opción. Sin embargo, el
médico relató que estudios demostraron que “si se trata a mujeres en edad
fértil antes del embarazo sí se evita la transmisión”.
Y además, “en edad pediátrica, la enfermedad es curable en
un 95% con el tratamiento adecuado, por lo cual, se debe reclamar un pronto
diagnóstico del niño, y las administrarle las nuevas formulaciones pediátricas
de las drogas disponibles, que pueden darse desde el momento del nacimiento”,
agregó.
El hecho de que no se detecten todos los casos de
transmisión perinatal “no solo representa un problema de salud pública por omisión
de un diagnóstico que debería ser muy sencillo, sobre todo conociendo el
universo de madres ya detectadas, sino que produce a largo plazo una afectación
de la salud de los infectados y una potencial ampliación en la cadena de
contagio, a punto de partida de las niñas afectadas, que luego tendrán hijos
con la enfermedad”, remarcó la doctora Elizabeth Bogdanowicz, infectóloga
pediatra, Secretaria del Comité de Infectología Pediátrica de la SAP.
Se estima que en la Argentina por lo menos un millón y medio
de personas de todas las edades están infectadas con Chagas, una enfermedad
parasitaria potencialmente mortal causada fundamentalmente por la picadura de
la vinchuca portadora del microorganismo y por el contagio de madre a hijo
durante el parto. Sin embargo, menos del 10% de los que viven con esta
enfermedad cuenta con diagnóstico y recibe algún tipo de tratamiento, ya que la
gran mayoría desconoce su condición y desarrolla la enfermedad en forma
asintomática.
“Lamentablemente, como el Chagas suele no dar síntomas, en
general no se lo sospecha y no se lo busca. Recién a largo plazo, tras 30 ó 40
años, aparecen, entre otras, complicaciones cardíacas muchas veces
irreversibles”, afirmó el doctor Altcheh. El tratamiento es altamente efectivo
con las drogas disponibles (Benznidazol y Nifurtimox) especialmente en la edad
pediátrica. Esto refuerza la necesidad de un diagnóstico temprano. A su vez se
han aprobado recientemente formulaciones pediátricas.
Las cardiopatías a largo plazo producidas por el Chagas son
causadas por una alteración en la conducción del estímulo eléctrico al corazón,
lo que produce un debilitamiento del ventrículo izquierdo que con el tiempo
favorece el desarrollo de insuficiencia cardiomegalia (aumento anormal del
volumen del corazón) y arritmias. Esta situación se origina en la formación de
nidos de parásitos en el propio músculo cardíaco. Otras alteraciones, aunque no
tan frecuentes por el tipo de parásito presente en nuestro país, son
afectaciones gastrointestinales y del sistema nervioso.
“En todos los casos, ésta sigue siendo una enfermedad propia
de la gente de menores recursos y constituye un verdadero indicador de
situaciones de pobreza”, reflexionó la doctora Bogdanowicz. Recomendó a su vez
que todas aquellas personas que hubiesen estado expuestas a la presencia de la
vinchuca o que tengan alguna duda sobre la posibilidad de estar infectados, no
duden en solicitarle a su médico la realización del test del Chagas. Y
particularmente que todas las embarazadas se cercioren que les hayan realizado
un estudio para diagnosticar y en caso de ser positivas se ocupen de reclamar
el testeo de sus bebés, sin excepción.
“Desde la Sociedad Argentina de Pediatría hemos firmado un
convenio con la OPS para fomentar y potenciar el diagnóstico y tratamiento de
los niños infectados, porque en la edad pediátrica la enfermedad es curable”,
sostuvo el doctor Altcheh, quien también es Director del Centro colaborador en
Chagas Pediátrico OPS/OMS. De hecho, la OPS lanzó en 2017 un programa integral
(ETMI plus) para eliminar hacia 2020 la transmisión materno infantil de cuatro
enfermedades, incluido el Chagas.
Como medidas de prevención para no contraer la enfermedad,
entre otras, los especialistas recomiendan evitar la exposición al insecto
transmisor, alejar los animales de corral de la casa (ya que ellos favorecen la
proximidad de la vinchuca al hogar), mantener el hogar ordenado, limpio y
fumigado, eliminar los techos de paja y revocar huecos en techos y paredes (que
es donde el insecto suele anidar), detectar deyecciones de la vinchuca (rastros
que dejan en sábanas, pisos y paredes), e instalar mosquiteros y mantenerlos en
buen estado.
Fuente: DocSalud - Ver más sobre Chagas