La tuberculosis es la novena causa de muerte a nivel mundial
y la primera por enfermedades infecciosas. El tema fue noticia en las últimas
horas por los seis funcionarios judiciales que según denuncian se contagiaron
en Comodoro Py. Pero en Argentina continúa siendo un problema de salud pública.
Van cuatro años consecutivos de aumento sostenido de la enfermedad.
Así lo informó en abril el Ministerio de Salud de la Nación
cuando publicó el primer boletín epidemiológico sobre tuberculosis a nivel
nacional. Sólo en 2016 hubo 11.560 casos y 757 muertes, 5% más que en 2015, y
con importantes diferencias entre jurisdicciones.
La tuberculosis es causada por el bacilo de Koch
(mycobacterium tuberculosis), una bacteria transmitida principalmente por la
inhalación de microgotas expelidas al toser, hablar y respirar. Como explicaron
a Clarín desde Salud, "tras la exposición al bacilo, una proporción de las
personas implicadas desarrollará una infección pulmonar latente, es decir, que
controlaron la bacteria. Aunque, luego, una pequeña proporción adquirirá
tuberculosis por alguna inmunodeficiencia".
Si bien se transmite por vía respiratoria, algunas personas
pueden tener tuberculosis en otro órgano que no sea el pulmón, por la
diseminación del bacilo. Pero su localización pulmonar es la que permite el contagio,
ya que las personas que la padecen permiten que el ciclo continúa: hablan,
tosen, estornudan y expelen los bacilos.
La tasa de notificación de casos de tuberculosis en
Argentina pasó de 24,9 por 100.000 habitantes en 2015 a 26,5 en 2016. A esto se
suma un incremento de tuberculosos en grupos jóvenes: el 17% son menores de 20
años. Seis de cada diez son varones.
Por otra parte, el Ministerio de Salud indicó que todo
paciente tratado correctamente no contagia. Por eso hacen hincapié en la
importancia de la consulta temprana y el diagnóstico precoz por el servicio de
salud, así como el cumplimiento total del tratamiento, que dura como mínimo 6
meses, con una combinación de drogas.
Nueve de cada 10 casos en Argentina fueron clasificados como
"casos nuevos y recaídas". Y entre ellos, el 50 % se dieron en
personas de 20 a 44 años. Del 60% de los casos que se registraron hasta el
final del tratamiento -se desconoce el resto- el 77% tuvo éxito. Entre los 35 y
44 años más de un tercio de las muertes por tuberculosis estuvo asociado con el
virus de la inmunodeficiencia humana (VIH).
Respecto al mapa de la tuberculosis en Argentina, la tasa de
notificación más alta de casos nuevos y recaídas −54,3 casos cada 100.000
habitantes− corresponde a la provincia de Jujuy, con 400 casos, mientras que la
tasa más baja perteneció a Catamarca.
Buenos Aires, en tanto, notificó casi la mitad (48,9%) del
total de casos nuevos y recaídas y el 72,9% de los casos con tratamiento
previo. Provincia aportó casi la mitad de los casos en todo el país, 48,0%, y
contó con la evaluación de casi el 60%. Capital representa la segunda
jurisdicción que más casos aportó al total del país (11,1%) y solo registró
información del 21,1% de los casos de enfermos residente.
Fuente: Clarín